¿QUÉ ES LA ENERGÍA?
La energía es la capacidad de los cuerpos para realizar un trabajo.
También puede ser definida como la capacidad de hacer funcionar las cosas.
La energía se puede manifestar en
diferentes maneras, de ahí surgen los diferentes tipos de energía. Ahora
conocerán la Energía Nuclear o Atómica.
La Energía Nuclear:
Es aquella que se libera como resultado de cualquier
reacción nuclear. Puede obtenerse mediante fisión (división de átomos) o por
fusión (unión de átomos). Generalmente, esta energía (que se obtiene en forma
de calor) se utiliza en la generación de electricidad, aunque también posee
otros usos: bélicos, hospitalarios, entre otros.
Los átomos son las partículas más pequeñas en que
se puede dividir un material. En el núcleo de cada átomo hay dos tipos de partículas (neutrones
y protones) que se mantienen unidas. La energía nuclear es la energía que
mantiene unidos neutrones y protones.
Pero primero la energía debe ser liberada. Ésta
energía se puede obtener de dos formas: fusión nuclear y fisión nuclear. En la fusión nuclear, la
energía se libera cuando los átomos se
combinan o se fusionan entre sí para formar un átomo más grande. Así es como el Sol produce
energía. En la fisión nuclear, los átomos se separan para formar átomos más pequeños, liberando energía. Las
centrales nucleares utilizan la fisión nuclear para
producir electricidad.
Las centrales
nucleares:
Las centrales nucleares son las instalaciones donde se
provocan reacciones nucleares de fisión para la generación de electricidad. En
el mundo existen alrededor de 400 plantas y representan el 30% de la
electricidad consumida en todo el mundo. Existen dos tipos de centrales
nucleares diferenciadas en el sistema de obtención de vapor y uso de agua, en
uno se utiliza H2O (agua) y en el otro se utiliza D2O
(agua pesada).
El funcionamiento se basa en la obtención de energía
calorífica mediante la fisión nuclear del nucleo de los átomos del conbustible.
Con esta energía calorífica, que tenemos en forma de vapor de agua, la
convertiremos en energía mecánica en una turbina y, finalmente, convertiremos
la energía mecánica en energía eléctrica mediante un generador.
El reactor nuclear es la encargado de provocar y controlar
estas fisiones atómicas que generarán una gran cantidad de calor. Con este
calor se calienta agua para convertirla en vapor a alta presión y temperatura. El
agua transformada en vapor sale del edificio de contención debido a la alta presión a que está sometido hasta llegar
a la turbina y hacerla girar. Esta turbina esta conectada a un generador
eléctrico mediante el cual se transformará la energía cinética en energía
eléctrica. Por otra parte, el vapor de agua que salió de la turbina, aunque ha perdido energía calorífica sigue estando en estado gas y muy
caliente. Para reutilizar esta agua hay que refrigerarla antes de volverla a
introducir en el circuito. Para ello, una vez ha salido de la turbina, el vapor
entra en un tanque (depósito de condensación) donde este se enfría al estar en
contacto con las tuberías de agua fría. El vapor de agua se vuelve líquido y
mediante una bomba se redirige nuevamente al reactor nuclear para
volver a repetir el ciclo.
Por
este motivo las centrales nucleares siempre están instaladas cerca de una
fuente abundante de agua fría (mar, río, lago), para aprovechar esta agua en el
depósito de condensación. La columna de humo blanco que se puede ver saliendo
de determinadas centrales es el vapor de agua que se provoca cuando se este
intercambio de calor.
¿La Energía
Nuclear: Renovable o No Renovable?
Estos últimos años, se ha visto a la
energía nuclear como una fuente de energía ecológicamente segura y renovable. Pero
no es un tipo de energía renovable.
Debido a que su funcionamiento es en
base a una fuente de combustible finita, es decir, que puede acabarse. El
uranio (y a veces el plutonio) que se usa en este tipo de energía es un recurso
natural igual que lo son el petróleo, el carbón y el gas natural. Estos poseen
un tiempo de “renovación”, pero es un proceso de miles de millones de años,
convirtiéndolos en fuentes de energía fósiles, no renovables.
La energía nuclear tiene un aspecto
ecológico por cuanto no produce emisiones de gases de efecto invernadero. La expansión de este tipo de
energía podría contribuir a controlar el calentamiento global. Sin embargo, sí
produce residuos radioactivos increíblemente tóxicos que deben desecharse, y el
desecho de los residuos nucleares sigue siendo un asunto controvertido.
ENERGÍA NUCLEAR EN EL URUGUAY.
La
utilización de dicha energía está prohibida desde el año 1997 por la ley
16.832, a pesar de esto nuestro país posee organismos que regulan su uso.
Nuestro
país tuvo un pequeño reactor nuclear cedido por los Estados Unidos en el año
1964, este solo tenía un fin de investigación.
En 1985 este es apagado.
Varios
gobiernos, como el de Julio María Sanguinetti estuvieron negociando una futura
construcción, la cual se ubicaría en la localidad de Paso de los Toros. La
sociedad al enterarse de dichas tratativas y observar los desastres de
Chernóbil y Goiana realizan movilizaciones donde el Parlamento prohíbe su uso
en nuestro país.
Más
recientemente, en el año 2007, vuelven los rumores de instalación de la energía
nuclear al país, esto debido a la crisis energética de esas fechas. El
accidente de Fukushima en Japón reabre una discusión frente a este tema.
Se
crea una comisión multipartidaria en la cual están estudiando la posible
instalación de una planta de Energía Nuclear en el país.
Algunas
instituciones encargadas de la regulación de dicha energía:
Ø Autoridad Reguladora Nacional en Radioprotección
Ø Comisión Nacional de Energía Atómica
Ø Dirección Nacional de Tecnología Nuclear
Ø Centro de Investigaciones Nucleares
Entre
octubre de 2010 y marzo de 2011, la consultora Factum realizó una encuesta acerca de su acuerdo o desacuerdo sobre la
instalación de una planta nuclear de generación de energía en el territorio
uruguayo ante estas centrales nucleares, la primera de ellas en octubre de
2010, antes del accidente nuclear de Fukushima I y la segunda luego
de este incidente, en marzo de 2011.
Ventajas:
La generación de energía eléctrica mediante energía nuclear permite reducir la cantidad de energía generada
a partir de combustibles fósiles (carbón y petróleo). La reducción del uso de
los combustibles fósiles implica la reducción de emisiones de gases
contaminantes (CO2 y otros).
Otra ventaja está en la cantidad de combustible necesario; con poca
cantidad de combustible se obtienen grandes cantidades de energía. Esto supone
un ahorro en materia prima pero también en transportes, extracción y
manipulación del combustible nuclear. El coste del combustible nuclear (generalmente uranio) supone el 20% del coste de la energía generada.
La producción de energía eléctrica es continua. Una central nuclear está
generando energía eléctrica durante
prácticamente un 90% de las horas del año. Esto reduce la volatilidad en los
precios que hay en otros combustibles como el petróleo.
Al ser una alternativa a los combustibles fósiles no se
necesita consumir tanta cantidad de combustibles como el carbón o el petróleo.
La reducción del consumo de carbón y petróleo ayuda a reducir el problema del
calentamiento global del cambio climático del planeta. Al reducir el consumo de
combustibles fósiles también mejoraría la calidad del aire que respiramos con
lo que ello implicaría en el descenso de enfermedades y calidad de vida.
A pesar del alto nivel de sofisticación de los sistemas de seguridad de
las centrales nuclear el componente humano siempre tiene cierta repercusión.
Ante un imprevisto o en la gestión de un accidente nuclear no se puede
garantizar que las decisiones tomadas por los responsables sean siempre las más
apropiadas. Tenemos dos buenos ejemplos en Chernóbil y en Fukushima.
Un inconveniente importante es la difícil gestión de
los residuos nucleares generados. Los residuos nucleares tardan
muchísimos años en perder su radioactividad y
peligrosidad.
Los reactores nucleares, una vez construidos, tienen fecha de caducidad.
Pasada esta fecha deben desmantelarse.
Debido precisamente a que las centrales nucleares tienen una vida limitada.
La inversión para la construcción de una planta nuclear es muy elevada y hay
que recuperarla en muy poco tiempo, de modo que esto hace subir el coste de la energía eléctrica generada.
Los reactores nucleares actuales funcionan mediante reacciones nucleares
por fisión. Estas reacciones se producen en cadena de modo que si los sistemas
de control fallasen cada vez se producirían más y más reacciones hasta provocar
una explosión radioactiva que sería prácticamente imposible de contener.
Probablemente el inconveniente más alarmante sea el uso que se le
puede dar a la energía nuclear en la industria militar. El primer uso que se le
dió a la energía nuclear fue para construir dos bombas nucleares que se
lanzaron sobre Japón durante la Segunda Guerra Mundial. Esta fue la primera y
última vez que se utilizó la energía nuclear en un ataque militar.